Por : Victoria Giraldo Sánchez
La calidad informativa de los periodistas empíricos es insuficiente frente a las demandas de la sociedad. ¿Cómo pueden plantearse procesos de formación para estos periodistas?
El hecho de ejercer el periodismo de forma empírica no necesariamente significa que no cumpla con las demandas de la sociedad, si bien es cierto que la academia ofrece muchas herramientas para la ejercer el oficio, estas en muchas ocasiones no son aprovechadas por los profesionales, que pasan por las aulas de clase sin llevar a buen término el proceso académico; es por esto que se ven opacados por los periodistas empíricos que tras muchos años de experiencia, consiguen resultados importantes en el ejercicio de la profesión.
Como lo expresa Henry Carvajal Castro, periodista emperico que fue consultado para este caso, “el periodismo empezó a la empíria, del afán de comunicarse y los grandes periodistas en el mundo son empíricos”, de alguna manera esto es cierto ya que no se puede desconocer el inicio del ejercicio periodístico; es la academia la que ha ido evolucionando, proporcionando fundamentos teóricos que sin duda alguna son importantes e indispensables en la formación periodística, pero que aunque suene paradójico, no garantizan una práctica comprometida y seria, ya que no es suficiente el conocimiento intelectual, cuando no se ejerce con vocación y pasión, elementos fundamentales para lograr buenos resultados, y estas son sin duda, algunas de las características de los buenos periodistas empíricos, porque hay que aclarar que no todos son buenos, y como lo menciona Mauricio Gómez, otro de los periodistas consultados, “ Así como los hay buenos empíricos, también los hay muy malos y así como hay muy buenos comunicadores, hay muchos que son perversos”.
Si bien no se desconoce que el periodismo empezó empíricamente, y como le expresa Henry Carvajal Castro, “desconocer la empíria es desconocer por ejemplo a Sócrates, a Freud, a los grandes pensadores del mundo que son la base sobre la cual se ha generado la comunicación en el mundo”, es necesario adecuarse a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, ya que el mundo avanza de a cuerdo a los parámetros que estas herramientas proponen, los periodistas de academia son preparados para manejar todo tipo de elementos tecnológicos, y están capacitados para enfrentar los retos que éstos plantean, caso contrario es lo que pasa con los empíricos, y como lo enuncia Javier Darío Restrepo, “el impacto de las nuevas tecnologías está dejando al descubierto las debilidades del periodismo tradicional”, lo importante es que estos no se queden en la improvisación, y que avancen de a cuerdo al ritmo que imponen los progresos en tecnología e información, ya que tanto la experiencia como la academia son complementos para llevar a cabo una práctica periodística.
Las opiniones de los periodistas consultados, no son ajenas a lo expuesto por Javier Darío Restrepo, pues también plantean actualización y profesionalización por medio de la academia para los periodistas empíricos, según Rafael Montoya, aunque sean buenos periodistas empíricos o profesionales, deben estar conectados con el día a día y capacitarse para ofrecer al público que cada día es más exigente, un trabajo responsable y veraz.
“Estar al día supone una actividad de estudio y aprendizaje permanente”, (Javier Darío Restrepo), para esto entonces es necesario acceder a cursos, talleres, seminarios y demás mecanismos que el medio ofrece, para establecer un contacto con la actualidad tecnológica y teórica que permita, como se mencionó anteriormente, entregar una información completa, sin olvidar que el ejercicio periodístico además de necesitar una buena academia, necesita periodistas comprometidos y con vocación, que ejerzan con compromiso una profesión que va directamente ligada con la sociedad, sus problemas y virtudes y que por lo tanto necesita personas capacitadas y con credibilidad, y esta característica se consigue precisamente con el trabajo serio que además de generar experiencia debe estar comprometido y dispuesto a enfrentar los nuevos retos.
Fuentes
• Javier Darío Restrepo, Consultorio ético.
• Henry Carvajal Castro, director del programa radial Futbol Total.
• Mauricio Gómez Buriticá, Caracol Radio.
• Rafael Montoya, 1A televisión.
La calidad informativa de los periodistas empíricos es insuficiente frente a las demandas de la sociedad. ¿Cómo pueden plantearse procesos de formación para estos periodistas?
El hecho de ejercer el periodismo de forma empírica no necesariamente significa que no cumpla con las demandas de la sociedad, si bien es cierto que la academia ofrece muchas herramientas para la ejercer el oficio, estas en muchas ocasiones no son aprovechadas por los profesionales, que pasan por las aulas de clase sin llevar a buen término el proceso académico; es por esto que se ven opacados por los periodistas empíricos que tras muchos años de experiencia, consiguen resultados importantes en el ejercicio de la profesión.
Como lo expresa Henry Carvajal Castro, periodista emperico que fue consultado para este caso, “el periodismo empezó a la empíria, del afán de comunicarse y los grandes periodistas en el mundo son empíricos”, de alguna manera esto es cierto ya que no se puede desconocer el inicio del ejercicio periodístico; es la academia la que ha ido evolucionando, proporcionando fundamentos teóricos que sin duda alguna son importantes e indispensables en la formación periodística, pero que aunque suene paradójico, no garantizan una práctica comprometida y seria, ya que no es suficiente el conocimiento intelectual, cuando no se ejerce con vocación y pasión, elementos fundamentales para lograr buenos resultados, y estas son sin duda, algunas de las características de los buenos periodistas empíricos, porque hay que aclarar que no todos son buenos, y como lo menciona Mauricio Gómez, otro de los periodistas consultados, “ Así como los hay buenos empíricos, también los hay muy malos y así como hay muy buenos comunicadores, hay muchos que son perversos”.
Si bien no se desconoce que el periodismo empezó empíricamente, y como le expresa Henry Carvajal Castro, “desconocer la empíria es desconocer por ejemplo a Sócrates, a Freud, a los grandes pensadores del mundo que son la base sobre la cual se ha generado la comunicación en el mundo”, es necesario adecuarse a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, ya que el mundo avanza de a cuerdo a los parámetros que estas herramientas proponen, los periodistas de academia son preparados para manejar todo tipo de elementos tecnológicos, y están capacitados para enfrentar los retos que éstos plantean, caso contrario es lo que pasa con los empíricos, y como lo enuncia Javier Darío Restrepo, “el impacto de las nuevas tecnologías está dejando al descubierto las debilidades del periodismo tradicional”, lo importante es que estos no se queden en la improvisación, y que avancen de a cuerdo al ritmo que imponen los progresos en tecnología e información, ya que tanto la experiencia como la academia son complementos para llevar a cabo una práctica periodística.
Las opiniones de los periodistas consultados, no son ajenas a lo expuesto por Javier Darío Restrepo, pues también plantean actualización y profesionalización por medio de la academia para los periodistas empíricos, según Rafael Montoya, aunque sean buenos periodistas empíricos o profesionales, deben estar conectados con el día a día y capacitarse para ofrecer al público que cada día es más exigente, un trabajo responsable y veraz.
“Estar al día supone una actividad de estudio y aprendizaje permanente”, (Javier Darío Restrepo), para esto entonces es necesario acceder a cursos, talleres, seminarios y demás mecanismos que el medio ofrece, para establecer un contacto con la actualidad tecnológica y teórica que permita, como se mencionó anteriormente, entregar una información completa, sin olvidar que el ejercicio periodístico además de necesitar una buena academia, necesita periodistas comprometidos y con vocación, que ejerzan con compromiso una profesión que va directamente ligada con la sociedad, sus problemas y virtudes y que por lo tanto necesita personas capacitadas y con credibilidad, y esta característica se consigue precisamente con el trabajo serio que además de generar experiencia debe estar comprometido y dispuesto a enfrentar los nuevos retos.
Fuentes
• Javier Darío Restrepo, Consultorio ético.
• Henry Carvajal Castro, director del programa radial Futbol Total.
• Mauricio Gómez Buriticá, Caracol Radio.
• Rafael Montoya, 1A televisión.
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